Mena Massoud, el actor de origen egipcio y protagonista del live-action de Aladdin, ha recibido un aluvión de críticas estos días por sus comentarios sobre La sirenita en su cuenta de Twitter, que decidía cerrarse después de que la polémica escalara progresivamente.
El próximo 26 de mayo, el live-action de La sirenita, protagonizado por Halle Bailey, aterrizará en las salas del cine de todo el mundo. Si bien, muchos medios se han aventurado ya a realizar estimaciones sobre su recaudación en taquilla, hablando incluso de posibles continuaciones. Un hecho que enfadaba especialmente a Massoud, quien compartía un tuit en las redes sociales.
"Nuestra película fue única, ya que el público fue a verla varias veces. Es la única forma de lograr la recaudación de los 1.000 millones de dólares con nuestro estreno. Mi apuesta es que La sirenita no va a cruzar la marca de los 1.000 millones, pero sin duda tendrá una secuela", señalaba el intérprete sobre el estreno del filme dirigido por Rob Marshall.
Estas palabras provocaban numerosas respuestas contra el actor, que era tachado de falta de compañerismo ante el lanzamiento inminente de un filme que ha recibido el odio del sector más conservador. Massoud decidía hacer caso omiso y se borraba su cuenta de Twitter.
Su mensaje surge después de que Massoud esperara a que Disney apostara por una secuela de Aladdin, después del éxito de este filme de acción real. Con un presupuesto de 183 millones de dólares, el filme recaudó más de 1.000 millones de dólares, convirtiéndose en uno de los live-action más exitoso de la compañía, aunque por detrás de las cifras de El rey león (más de 1.663 millones recaudados).
La polémica de Will Smith, en el papel del Genio, y las críticas profesionales dispares fueron clave en la paralización de un rumoreado proyecto que continuaría con la trama del filme de Guy Ritchie. Una película que, por el momento, parece que nunca verá la luz.